Sobre nosotros
Más que café: un movimiento que conecta tierra, tradición y futuro
Magnagaea nace en las alturas del Valle del Cauca, donde el café no es solo un cultivo, sino una forma de entender el mundo. Somos una red de caficultores, tostadores y visionarios que creen en el poder del trabajo con propósito.
Aquí, en el pequeño pueblo de Costa Rica, cada grano cuenta una historia. No solo producimos café de origen excepcional; construimos caminos hacia un desarrollo sostenible, cultivamos alianzas reales y sembramos raíces de cambio. Magnagaea es más que una marca: es una comunidad comprometida con una Colombia más justa, más conectada y más consciente
Raíces vivas: cultivar con intención y respeto
En Magnagaea, no imponemos, colaboramos con la tierra. Creemos que el futuro del café nace del respeto por los ciclos naturales y de prácticas conscientes en cada etapa: desde el suelo que nutrimos hasta el café que compartimos con el mundo.
Aquí, tradición e innovación caminan juntas. Honramos el conocimiento ancestral mientras aplicamos nuevas ideas para elevar la calidad sin perder el alma. Es un arte en equilibrio: proteger lo que somos y avanzar hacia lo que podemos ser, taza a taza.
Ven a Finca Magnagaea: vive el café en su origen
Más que una visita: es una inmersión.
Camina entre cafetales, conversa con quienes hacen posible cada cosecha y descubre el alma detrás de cada taza. En Magnagaea, el café no solo se prueba: se siente.
Cada rincón de la finca refleja nuestra historia de comunidad, cuidado y propósito. Te esperamos para compartirla contigo.
Un santuario natural donde el café florece con propósito
A solo cinco minutos de Costa Rica, en el corazón del Valle del Cauca, se encuentra nuestra finca: un oasis de biodiversidad, sabor y equilibrio.
• Cultivamos a 1.400 metros sobre el nivel del mar, en suelos volcánicos fértiles junto al río Guabas.
• Un microclima único, luz solar balanceada y tierra rica crean las condiciones ideales para un café con carácter.
• Más de 2.000 aves, arroyos cristalinos y árboles nativos coexisten en armonía con nuestros cultivos.
Magnagaea no es solo una finca: es un refugio vivo, donde el café y la naturaleza se nutren mutuamente.
Agricultura consciente: cultivamos vida, no solo café
En Magnagaea, regenerar es tan importante como cosechar. Aplicamos principios agroecológicos que revitalizan el suelo, protegen la biodiversidad y aseguran la vitalidad de la finca para quienes vendrán después.
Nuestro impacto:
• Suelos más fértiles gracias a compost orgánico de gallinas, ganado y lombrices rojas californianas.
• Plantas más sanas, cosechas más consistentes.
• Control natural de plagas sin químicos, preservando el equilibrio ecológico.
Aquí, cada grano nace en armonía con la Tierra.
Del grano a la taza: un arte sensorial en cada paso
En Magnagaea, cada café es una experiencia diseñada para sorprender. Desde procesos tradicionales hasta fermentaciones experimentales, exploramos todas las posibilidades que ofrece el grano, liberando sabores intensos y aromas complejos.
Todo comienza con un lienzo en blanco
Seleccionamos solo los mejores granos de nuestras mejores cosechas. Cada lote se trabaja como una obra única.
Fermentación con intención
Probamos distintas levaduras, temperaturas y tiempos para revelar perfiles vibrantes, llenos de capas y matices.
Secado con precisión
Usamos sistemas solares con control térmico para lograr texturas y aromas excepcionales, con respeto por el ritmo natural del grano.
Tueste personalizado
Cada perfil se tuesta a medida, buscando el equilibrio perfecto entre dulzura, acidez, cuerpo y aroma. El resultado: un café que cuenta su propia historia, sorbo a sorbo.
Explora. Saborea. Crea futuro.
En Magnagaea, la curiosidad es nuestro motor, y el café, nuestra forma de expresión. Rompemos moldes, exploramos nuevos caminos de sabor y apostamos por lo extraordinario en cada taza.
Ya seas amante del buen café, tostador apasionado o alguien que valora la sostenibilidad y la conexión humana: aquí tienes un lugar.
Construyamos un mañana más consciente, una taza hermosa a la vez.